Amores Ridículos

Historias, tonterías y lucubraciones varias de un anacrónico perdido en esta sociedad.

¡Oh Capitán, mi Capitán!

¡Oh, capitán!, ¡mi capitán!, nuestro terrible viaje ha terminado,
el barco ha sobrevivido a todos los escollos,
hemos ganado el premio que anhelábamos,
el puerto está cerca, oigo las campanas, el pueblo entero regocijado,
mientras sus ojos siguen firme la quilla, la audaz y soberbia nave.
Mas, ¡oh corazón!, ¡corazón!, ¡corazón!
¡oh rojas gotas que caen,
allí donde mi capitán yace, frío y muerto!

¡Oh, capitán!, ¡mi capitán!, levántate y escucha las campanas,
levántate, por ti se ha izado la bandera, por ti vibra el clarín,
para ti ramilletes y guirnaldas con cintas,
para ti multitudes en las playas,
por ti clama la muchedumbre, a ti se vuelven los rostros ansiosos:
¡Ven, capitán! ¡Querido padre!
¡Que mi brazo pase por debajo de tu cabeza!
Debe ser un sueño que yazcas sobre el puente,
derribado, frío y muerto.

Mi capitán no contesta, sus labios están pálidos y no se mueven,
mi padre no siente mi brazo, no tiene pulso ni voluntad,
la nave, sana y salva, ha anclado, su viaje ha concluido,
de vuelta de su espantoso viaje, la victoriosa nave entra en el puerto.
¡Oh playas, alegraos! ¡Sonad campanas!
Mas yo, con tristes pasos,
recorro el puente donde mi capitán yace,
frío y muerto.


Walt Whitman

2 Alusiones al post:

Maya 6 de septiembre de 2009, 23:04  

Juer!!has hecho q me pique la curiosidad y q en cuanto tenga tiempo me haya propuesto volver a ver la peli¿me acompañas?
Bsis!

Miguel Bermúdez 6 de septiembre de 2009, 23:52  

Por supuesto que te acompaño ;)

Grandísima película, y si encima estoy bien acompañado, mejor que mejor ^_^

Yo

Mi foto
Jerez/Madrid, Cadiz/Madrid, Spain
Desvaríos varios de un aburrido ególatra.