Suponte que escribes en una hoja de papel cuanto ves y piensas. Si escribes en una hoja de papel cuanto ves y piensas, poco a poco la vida parece no transcurrir en el presente: la vas escribiendo, y es como si la vieras ya pasada, muerta, como si vieras en la cara de un niño la cara que tendrá cuando viejo. Escribes la vida, y la vida parece una vida ya vivida. Y, cuando mas te acercas a las cosas para escribirlas mejor, para traducirlas mejor a tu propia lengua, para entenderlas mejor, cuando mas te acercas a las cosas, parece que te alejas mas de las cosas, mas se te escapan las cosas. Entonces te agarras a lo que tienes mas cerca: hablas de ti mismo. Y, al escribir de ti mismo, empiezas a verte como si fueras otro, te tratas como si fueras otro: te alejas de ti mismo conforme te acercas a ti mismo. Ser escritor es convertirse en otro. Ser escritor es convertirse en un extraño, es un extranjero: tienes que empezar a traducirte a ti mismo. Escribir es un caso de suplantación de personalidad: escribir es hacerse pasar por otro.
5 Alusiones al post:
Y....tooooma ralladaaaaaaaaaaa!!!
Jajaja,q interesanting,en serio,nunca lo habia visto asi...
Asiq todos mis años en los q escribi diarios fui otra persona??mas extranjera q nunca pq era mas personal q nunca?oh my god!me voy a tener q replantear muchas cosas!
Besos!
Se supone que en los momentos en los que escribias si, eras otra persona, aunque por poco tiempo.
pd: o no...
Pues yo escribo...pero para saber quien soy.
=)
Hace unos segundos leí tu comentario, sí me hago vieja mientras acabo de escribir una a de una.
Yo también pensé esto una vez.
Vale chabal ya te vale este comentario lo has echo para cachondearte de mi ... si yo escribiese en una hoja de papel todo lo q se me ocurriese la hoja seguiria en blanco sguramente :D
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